LOS FALSOS POSITIVOS
Modalidades enfermizas de huida de la realidad en la sociedad contemporánea, por alternativa y culta que sea. Qué harto estoy de la gente que se hace la optimista. Y cómo se pueden todos ir a hacer puñetas de encaje de seda a Flandes. Qué cansinos los que se creen que “ser positivos” es como pertenecer al club de la gente que detenta el monopolio de la salud mental, y que los demás quedamos fuera de este club, claro está, por elección y defecto propio. ¿Es usted uno de ellos? Podría ser. Si a las primeras frases de este párrafo una de sus respuestas posibles sería “hombre, mejor el optimismo que otra cosa”, o “la gente optimista hace lo que puede” y demás, puede que el texto a continuación esté dedicado a usted. Pero antes, les contaré un pequeño gran secreto: la gente que se declara “positiva” puede ser profundamente destructiva en sus resultados vitales, y la gente que ustedes califican como negativa probablemente hagan más por el mundo y por los demás que usted y todos s...